Por: Juan Carlos Herrera Acosta
Syracuse-NY/ 18-11-2018
El popular actor Estadounidense, Will Smith correrá en el Marabana, según detalla el sitio Jit en un articulo, ya son varias las figuras del entretenimiento que han visitado la habana desde que Barack Obama decidiera restablecer las relaciones con la dictadura castrista, y es que, como todo indica, existen dictaduras buenas y malas y la ya muy longeva tiranía de la habana sabe como manejar bien las fichas en el escaque de ajedrez político para manipular a figuras como Smith.
El actor no visitará una cárcel cubana, ni tampoco pedirá libertad para el pueblo Cubano, será simplemente un adorno mas que el régimen expondrá como trofeo de victoria en el plano político, Smith no exigirá elecciones libres y transparentes, ni libertad de culto y asociación, los presos políticos de la isla continuarán siendo reprimidos ferozmente frente al silencio cómplice de ''Figuras'' como Smith, las mazmorras de los castro se mostrarán complacidas con el mutismo del popular actor estadounidense.
George Orwell escribió, '' No se establece una dictadura para salvaguardar una revolución; se hace la revolución para establecer una dictadura ''.(1984); Will Smith no escuchará el clamor de un pueblo que exige libertad como tampoco se pondrá del lado de los millones de exiliados que viven lejos de su patria y de su identidad por culpa de esa dictadura omnipresente que él apoyará con su participación en esta obra de teatro maratonista.
Debería recordársele al actor esta frase de Winston Churchill, '' La dictadura, devoción fetichista por un hombre, es una cosa efímera, un estado de la sociedad en el que no puede expresarse los propios pensamientos, en el que los hijos denuncian a sus padres a la policía; un estado semejante no puede durar mucho tiempo'', de nada servirá, los cubanos continuamos remando a solas en este mar de sordos y ciegos políticos, en medio de este mar de traidores y cómplices, en medio de las penurias y la falta de dignidad de algunos como este ''Famoso''actor que correrá las calles de la habana en una maratón y no se percatará que está derruida totalmente, que se cae a pedazos frente al inmovilismo político y económico de la mas férrea dictadura que haya conocido el hemisferio occidental.